Marybel; la “cargada” a favor de Mara, y la estrategia hacia 2022
Referentes ineludibles del CEN de MORENA estuvieron conectados con Mara durante su inscripción. En sus épocas triunfales, cuando no tenía rivales de peso en las calles, el PRI dirimía gran parte de sus candidaturas en los pasillos de Palacio Nacional. Los ritos del poder incluían, en algún momento, la “cargada”, que era la adhesión de diversos referentes del sistema (personas u organizaciones) a la nueva candidatura.
Algo de eso pareció suceder en las últimas horas con la inscripción de Mara Lezama para su reelección en Cancún por MORENA. Las compañías virtuales que tuvo la alcaldesa en ese momento dijeron mucho de cuál es la base política que sustenta su idea de reelección.
Allí estaban no sólo funcionarios y regidores de Mara, sino también los legisladores federales José Luis Pech y Mildred Ávila, morenistas de base como Hector Ortega, y hasta el mismísimo Rafael Marín. Y aquí vale la pena detenerse un rato.
Cualquiera que conozca las entrañas de MORENA sabe que “Rafa” es el líder moral indiscutible del partido, y la representación más cercana que el morenismo quintanarroense tiene de Andrés Manuel López Obrador. La relación entre ambos va mucho más allá de la política, y se adentra en cuestiones personales de esas que nunca se olvidan.
Quiénes conocen a Rafa Marín dicen que jamás hubiese participado de ese evento de Mara sin un guiño explícito del Presidente. Ese es el mensaje que dejó su presencia.
Pero también hubo más. Referentes ineludibles del CEN de MORENA estuvieron conectados de manera constante con Mara durante su inscripción, y nunca han dejado de comunicarse con ella en todo este proceso, para guiarla y ponerse de acuerdo sobre los pasos a seguir.
En un sector muy amplio del morenismo, lo de este sábado fue visto como que ya hay una decisión tomada de ir con Mara a la reelección.
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APARATO Y ESTRUCTURA
La cargada hacia Mara no fue sólo de estilo priísta, sino que tuvo un correlato en los hechos. Recientemente, Mara se reunió con un grupo de políticos emanados del PRI (pero ¿quien no lo es en Quintana Roo?) que le garantizaron trabajar para ella el 6 de junio y más allá. No fue, que se entienda, un acuerdo de palabra. Se trató de una reunión casi de trabajo, donde se distribuyeron tareas y territorios, y se habló de estructura electoral y estrategias.
Esa reunión y esos acuerdos no fueron fortuitos; hay una instrucción concreta de fuertes grupos nacionales del viejo PRI, con vínculos actuales en MORENA y el Verde Ecologista, en el sentido de que la alcaldesa de Cancún es la elegida. La base política que hoy arropa a Mara Lezama es mucho más amplia y profunda de lo que era hace pocos días, y también de lo que se conoce públicamente.
Ese equipo ya trabaja para el 6 de junio, pero, políticos al fin y al cabo, se ordenan pensando en el futuro de acuerdo a un nuevo equilibrio de poder que orbita alrededor de Mara Lezama hacia 2022.
LA MIRADA DE MARYBEL
Los “halcones” del entorno de Marybel Villegas niegan que haya una decisión tomada, y dicen que están operando en las calles de Cancún, pero también en las oficinas de la Ciudad de México, para que la senadora sea la candidata.
Por ejemplo, se sabe que Marybel podría quedarse con toda la estructura de la promoción del voto del partido, y que su esposo Jorge Parra, y el sector del Comité Estatal que le responde, van y vienen entre ambas ciudades buscando acuerdos que amplíen la base social y electoral de la senadora.
Pero en esta columna ya se ha dicho que Marybel es más reflexiva y política que el marybelismo, y no puede dejar de mirar el escenario con todas sus ramificaciones potenciales. Hasta las que no le son favorables.
La senadora dice que el CEN le prometió a ella que serían las encuestas las que definirían la candidatura de Cancún, y asegura que en todos los sondeos ella está arriba de Mara. Pero también sabe que, como sea, MORENA va a ganar en Cancún. Y eso hace que la decisión de la candidatura pase más por la política que por los números.
En ese sentido, en esta misma columna ya se ha dado una postura: para MORENA no tendría sentido sacar a Mara de la reelección si va a ganarla. Con esos números, el partido debe preocuparse por los municipios que puede perder (como Solidaridad, si insisten en poner de candidata a Laura Beristain) y en la sucesión de 2022, más que buscar problemas donde no los hay.
Por supuesto, se trata de un idea personal que se deriva de una lectura política de una situación. Y, por lo tanto, podría simplemente estar equivocada.
DESTINO 2022
Referentes ineludibles del CEN de MORENA estuvieron conectados con Mara durante su inscripción. ¿Qué pasa si Marybel no es elegida candidata de Cancún? La senadora hará hincapié en que ella está arriba en las encuestas, y buscará torcer políticamente la decisión. A la larga, sin embargo, aceptaría el veredicto, y empezaría a pensar en el día después, que es la elección de 2022.
La estrategia sería lograr impulsar (o negociar) candidatos suyos en diversos municipios, y que esa sea su base política, electoral y económica para caminar el estado. Los nombres que surgen allí son el del “Wato” Peniche en Isla Mujeres, Marciano Dzul en Tulum, Luis Gamero en Othon P. Blanco, y hasta Joselin Avila en Lázaro Cárdenas, por el MAS.
Lo más seguro es que la senadora logre algunas de esas posiciones, aunque el grupo interno del morenismo que se ha organizado en su contra es muy amplio y fuerte, y hará todo lo que pueda para que no avance.
¿Sus operadores políticos y electorales irían en contra de Mara en la elección de Cancún? Es una opción, pero sería una decisión que conllevaría más riesgos que posibles beneficios, porque MORENA no va a perder, y la senadora podría quedar muy expuesta.
Además, muchos de los referentes del marybelismo van a ser impugnados, y algunos es posible que hasta queden fuera del partido, porque en sus ataques a Mara han violado los estatutos y las convocatorias de las elecciones.
¿Si Marybel no es la elegida para Cancún se irá de MORENA? Es integrante de la Jucopo en el Senado, está vinculada a fuertes actores de la 4T, como Ricardo Monreal y Gabriel García, y se mantendría como aspirante seria para 2022. No tendría sentido abandonar el único partido que hoy por hoy puede ganar elecciones en Quintana Roo.
Marybel sabe muy bien que más allá de MORENA sólo hay un extenso desierto electoral.
Por Hugo Martoccia
