¿Qué modelo se debe implementar en México?
Sin duda es un gran dilema: la industria de alimentos procesados y bebidas azucaradas está en alerta roja: desde principio de año la Secretaría de Salud conformó un grupo de expertos para elaborar un modelo eficiente contra la obesidad y la diabetes. Y es que… en México se registra una epidemia de enfermedades crónico-degenerativas: 15.9% de los adultos padece diabetes, además, de acuerdo con Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), es el segundo país con obesidad! Un punto clave para reducir esas peligrosas cifras, es que el consumidor tenga información adecuada sobre los productos que consume y tome la decisión de continuar su compra o no, ello a través de algo muy sencillo pero muy poderoso: un etiquetado que le advierta los daños a su salud…
CABILDEROS A TODA MÁQUINA
El asunto se discute actualmente en el Congreso de la Unión pues la iniciativa privada pugna contra el nuevo etiquetado de productos chatarra. Y… en esta guerra, la pregunta inevitable es: ¿qué pesará más, la industria refresquera y de procesados o la salud de los mexicanos? Parece una respuesta obvia pero… dicha industria es muy, muy poderosa. Tiene trabajando a los llamados “cabilderos” a toda máquina. Y es que, la historia reciente nos muestra que siempre han ganado los intereses de esas grandes empresas. En ocasiones anteriores, sí han habido varios intentos por modificar la Ley General de Salud e imponer un nuevo etiquetado pero… al final… los pocos que lo han impulsado, se han visto avasallados. Cualquier iniciativa al respecto ha sido tradicionalmente desechada, algo que al parecer, ahora puede cambiar… no lo sabemos aún.
CAMBIAR AMBIENTE OBESOGÉNICO
¿En qué consiste el aparentemente sencillo asunto del etiquetado? Se trata de modificar la ley para que haya una advertencia en los alimentos que potencialmente dañan la salud, o sea, un modelo de etiquetado que sea de fácil comprensión para la población; la propuesta de reforma pretende advertir a los consumidores de los riesgos a la salud por el consumo de productos con alto contenido de grasas y azucares… obvio, tiene la finalidad reducir las pandemias de obesidad y diabetes que hay en México. Y vaya, no es algo del otro mundo. La propuesta que se posiciona con más fuerza es el modelo de advertencia como el que se utiliza en Chile el cual consiste en octágonos con la leyenda “alto en azúcar”, “alto en sodio”, “alto en grasa” y “alto en calorías”, el cual se ha probado que es sencillo para que lo comprendan desde niños hasta adultos.
DERECHO HUMANO A LA SALUD Y AL BIENESTAR
Ya con un etiquetado específico, el consumidor recibe de manera fácil la información y puede elegir los productos que son más saludables y evitar el consumo de aquellos que no lo son. Resulta que el modelo chileno es muy innovador y ha demostrado que cumple con los dos objetivos indispensables: hacer que la gente compre los alimentos sanos y evite los que dañan, y… pequeño detalle, ha forzado a la industria a reducir los ingredientes negativos para que sus productos no tengan los octágonos y sigan vendiendo. Sin embargo, la industria de alimentos en México está en contra de ese etiquetado, ¿por qué? Evidentemente, si no eliminan los ingredientes dañinos y la gente ya está más informada, se les van a reducir las ventas de los productos de baja calidad nutricional. Pero… podría suceder un cambio que beneficie a todos… Según especialistas, lo que ha sucedido en otros países es que, aunque se pongan los sellos de advertencia, no hay pérdidas en el crecimiento económico, porque al final la industria se va adaptando a las preferencias y genera productos más saludables. O sea, al final, todos podríamos ganar…
TRABAJO CONJUNTO DE LA SOCIEDAD
Para cambiar lo que especialistas llaman un ambiente obesogénico , el etiquetado es un importante aspecto, pero claro que hay más: es necesario controlar la mercadotecnia dirigida a niños, que es un problema enorme pues los menores de edad son un sector de la población muy vulnerable, apenas se está en desarrollo y en una etapa en la que forman hábitos para toda la vida. No hay que ser genios para pensar que si todos los sectores, gobierno, sociedad, academia e industria trabajan en mejorar cada quien en lo suyo, se pueden crear las condiciones para fomentar decisiones más saludables y bajar esas peligrosas cifras de obesidad en la población mexicana…
*Yvette Hesse E. Directora de Grupo Editorial Kankun y Gente Q.Roo, revista de negocios y política.
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